El uso continuado de Proteoglicanos medix contribuye a la restauración de la piel que recupera un aspecto firme, terso y luminoso. De esta forma compensamos, en parte, el deterioro que el paso del tiempo y las agresiones externas van ocasionando.
En su composición contiene un 3% de proteoglicanos, un 5% de vitamina C en forma de sodio ascorbilfosfato y un 1% de una mezcla de de ácidos grasos, triglicétridos y vitamina E con propiedades hidratantes y nutritivas.
Los proteoglicanos son una familia de macromoléculas naturales que en la piel contribuyen a dar consistencia a la matriz extracelular y facilitan la difusión de nutrientes contribuyendo a mantener su hidratación.
La vitamina C interviene en la regeneración de la piel, tiene propiedades antioxidantes y favorece la formación de colágeno y la regeneración cutánea. Su aplicación tópica confiere luminosidad a los cutis apagados a la vez que proporciona firmeza, suavidad y elasticidad a la piel.
La vitamina F aporta ácidos grasos necesarios para mantener la piel hidratada. Colabora en el restablecimiento la función de barrera protectora de la piel mejorando la cohesión de la capa córnea.
La vitamina E neutraliza los radicales libres y protege contra los rayos UV. También es esencial para formar la estructura de las células.
El uso continuado de Proteoglicanos medix contribuye a la restauración de la piel que recupera un aspecto firme, terso y luminoso. De esta forma compensamos, en parte, el deterioro que el paso del tiempo y las agresiones externas van ocasionando.
En su composición contiene un 3% de proteoglicanos, un 5% de vitamina C en forma de sodio ascorbilfosfato y un 1% de una mezcla de de ácidos grasos, triglicétridos y vitamina E con propiedades hidratantes y nutritivas.
Los proteoglicanos son una familia de macromoléculas naturales que en la piel contribuyen a dar consistencia a la matriz extracelular y facilitan la difusión de nutrientes contribuyendo a mantener su hidratación.
La vitamina C interviene en la regeneración de la piel, tiene propiedades antioxidantes y favorece la formación de colágeno y la regeneración cutánea. Su aplicación tópica confiere luminosidad a los cutis apagados a la vez que proporciona firmeza, suavidad y elasticidad a la piel.
La vitamina F aporta ácidos grasos necesarios para mantener la piel hidratada. Colabora en el restablecimiento la función de barrera protectora de la piel mejorando la cohesión de la capa córnea.
La vitamina E neutraliza los radicales libres y protege contra los rayos UV. También es esencial para formar la estructura de las células.